viernes, 6 de noviembre de 2009

LA FUENTE DEL CARIÑO

Si pudiera asimilar el deleite del agua que me observa,
si pudiera limpiar todo lo sucio con ese agua que me sonríe.
Veo una historia que borda las costuras más hermosas,
la añoranza con la melancolía que dibuja,
unas pulcras páginas con unos sencillos versos.
Bello manantial, bello manantial…
A ti, Fuente del Cariño,
a ti te lo quiero contar.

Si puedo escribir minutos
del surcar toda una vida.
El pájaro transmite con su canto
una historia que a través del tiempo,
remanso de paz y amor,
azota la brisa tenue sobre los árboles centenarios
formando dialogo sin voz.

Mientras, nuestros cuerpos embelesados con el nombre
que te asignaron, fuente del Cariño.
Transcurrían las horas como minutos fugaces,
en un mutuo palpitar del corazón,
esperando una respuesta al sonido monótono
del agua al caer en el fondo de la balsa,
en el dulce remanso del silencio.

Fuente del Cariño.
Sí, Fuente del Cariño,
donde mecía la madre al niño,
donde el abuelo contaba historias…
Donde, no sé donde…
Donde, y sencillamente, la tarde era noche,
donde la noche era gloria.

Higinio San Millán, 11/10/09

1 comentario:

  1. Muy bien Higinio! me has hecho recordar mi primer beso !!!
    Felicidades,me gusta mucho.
    Teresa

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