viernes, 4 de septiembre de 2009

YO TENGO MUCHAS COSAS QUE CONTAR…

Yo tengo muchas cosa que contar de cuando era jovencita porque se murió mi padre y lo pasamos muy mal porque éramos muy pequeñas.
Mi madre era la madre más buena del mundo y un día una vecina le dio una gallina que se le cayó del árbol donde dormían. Mi madre la guisó pero antes hizo una prueba con un gato que teníamos. Pobre gato.
La gallina tenía huevos por poner y mi madre la guisó, con un olor que tenía que quién no se la comía. El gato se hartó de comer y nosotras también. Nos fuimos a trabajar y el gato “jartito” de comer se fue a dormir. Cuando llegamos mi madre estaba muerta de miedo y nos preguntaba “¿Tenéis dolor de tripa? Nosotras le decíamos, ¿Por qué nos pregunta esto? “Por nada, por nada” Tanto insistimos que nos lo dijo, “Porque el gato no aparece” La pobre no decía nada y la veíamos triste y le decíamos
¿Qué te pasa? ¿No te sentó bien la gallina? Y más nervios le entraban cuando vemos el gato entrar por el patio. Mi madre lloraba de alegría y dijo “Nunca más os haré esto: Comeréis pan tostado con aceite que es más sano”
Isabel Milla

2 comentarios:

  1. Isabel es muy bonito todo lo que escribe un saludo Conchi López

    ResponderEliminar
  2. Isabel sique escribiendo te quiero.

    Conchi López

    ResponderEliminar